Porque hay que escribir sobre algo. Contar cualquier cosa, con tal de revestir de adjetivos el sedal desnudo. Y hacerlo descender por la brecha, el túnel, el corredor, el pozo. Sólo para demostrar que no puede estar vacío. Preposiciones así son las que arruinan cualquier obra.
La arruinan.
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La Telaraña en El Mundo.
Etiquetas: Artículos, Literatura
4 Comments:
Dios bendiga el adorno gratuito y las mil vueltas de tuerca. xD
uhmmm le has dado la vuelta a mi corolario:-p
Saludos
Fx
Alguien tenía que defender la belleza de la pedantería. Al fin y al cabo el erotismo se alimenta de su artificilidad y su inutilidad, esos elementos que tanto irritan a la "petite bourgeoisie". :P
Metáforas, necesitamos metáforas que salten por nosotros, que ya vamos teniendo unos cuantos parpadeos.
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