La inercia

Hace unos días concluyó la Fira del Llibre en Es Born de Palma. Como de costumbre, algunas de las librerías participantes elaboraron su particular lista de más vendidos. Y a la vista de los resultados, la sombra del escritor y lingüista Umberto Eco - y en especial de El nombre de la rosa - es tan alargada que los tres libros más vendidos le deben cierta similitud de atmósfera y hasta de temática. Obviemos el tema de la calidad.

Estos libros son El código da vinci, de Dan Brown, La sombra del viento, de Ruíz Zafón y La hermandad de la sábana santa, de Julia Navarro. Es obvio que aunque las ferias del libro intentan, saludablemente, promocionar autores locales no logran que el público comprador escape a los influjos de la publicidad y el marketing. Del código ya hablé en su momento, y salvo venderse como rosquillas y soliviantar al Opus Dei - lo que tiene su encanto - no pasará a ninguna historia de la literatura. Los otros dos no los conozco.

Leo que el 16 de junio sale a la venta, en Italia, la nueva novela del Umberto Eco. Lleva por título La Misteriosa Fiamma della Regina Loana, y trata sobre un hombre de mediana edad que de repente pierde su memoria personal, su identidad, en un mundo del que sí conoce, sin embargo, su funcionamiento rutinario, su mecánica y lugares comunes. Si el libro tiene éxito, ya podemos intuir una avalancha de autores exprimiendo el nuevo filón: el del desarraigo interior, el de las señas de identidad perdidas y las amnesias galopantes. Pero esta vez, la metáfora resulta muy manida: todos, en alguna ocasión, nos quedamos como suspendidos en la más absoluta ignorancia de nuestro ser, pero no encontramos mayores problemas en continuar enganchados a la rueda de un día a día que no se detiene ni aunque nos queramos bajar. Cuestión que, por otra parte, resulta una de las aspiraciones más antiguas y loables del ser humano.