LA TELARAÑA: Delacroix y los argumentos

lunes, abril 18

Delacroix y los argumentos

La Telaraña en El Mundo.

Hay senos gloriosos y tangentes. Muy tangentes. Casi como de andar por casa y arremolinarse a su alrededor. Senos rotundos que nos recuerdan el globo terráqueo, la globalización de la crisis y, por lo visto, hasta la algarabía íntima de los glóbulos sanguíneos. ¡Hay que ver cómo se les altera la sangre a algunos! Gracias a ellos, la candidata del Partido Democrático de Ciutadella, Sole Sánchez -un cóctel de exhibicionismo fatuo, acción directa y, sobre todo, Wikipedia- ha saltado del brillo efímero de un cartel electoral a la fama, también fugaz, en todos los corrillos de la Red.
Su doble y esférica condición se debate entre la burda hipérbole de los magníficos pechos al aire de la heroína de Delacroix, en su célebre cuadro de la libertad guiando al pueblo -es decir, la revolución burguesa de 1830-, y las rancias quejas de Esquerra de Menorca denunciando su obscenidad ante el Institut Balear de la Dona. Nada menos. Dos senos atrapados. Dos pezones victoriosos. ¡Hasta ahí podíamos llegar! No muy lejos. Como de costumbre.
No sé cuánto valen los pechos de Sole como argumentos electorales. Quizá muy poco. O nada. Pero en tiempos tan rácanos de ideas voluptuosas, uno preferiría arrimarse, de veras, a unas tetas dadivosas de saber y, si no fuera mucho pedir, de inteligencia, que andar hurgando entre las ubres resecas de los de siempre. Los de la leche agria. Aquellos polvos. Estos lodos.


Etiquetas: