Francisco Fuster -gracias, amigo- tiene el humor y la generosidad de escribir en su blog sobre Tratado de las cosas sin nombre. Podéis leerlo en este enlace.
Creo, sin exagerar un ápice, que la mayor satisfacción que puede deparar un libro -aparte, como es obvio, de escribirlo- es saber que alguien, después, lo lee. ¡Es un milagro!
Etiquetas: Creación, Literatura, Varios
6 Comments:
Visto, visto.
¡Enhorabuena Juan!. :-)
Slds...
P.S.: Te mandé una invitación para Google Reader, no sé si lo habrás visto...
Saludos, Santi;-)
No utilizo Google Reader... pero miraré a ver qué es;-P
No llegó, pero estoy seguro de que llegará.
Abrazo!!!!
Que llegará seguro, pero me temo que tendrás que esperar a que me lleguen a mí (que tampoco) y te lo envíe... en fin. Curiosamente a otros les llegó antes del puente. Si es que...
Bueno, paciencia;-)
Enhorabuena.
Je! Eso es fácil Juan...yo lo tengo desde hace muuuuuucho tiempo :-) Por eso, te sigo del Google Reader.
Slds...
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