Sanidad meteórica
La Telaraña en El Mundo.
Si no fuera rigurosamente cierto, creería que es
absolutamente mentira. Resulta que un buen día llevas al chico al médico de
cabecera de la Seguridad Social por un asunto de meteorismo y gases -un asunto
que no parece muy serio, pero que huele muy mal y que, sobre todo entre los
jóvenes, tiene un montón de daños colaterales, por así decirlo- y sales entre
confundido y asombrado, contrito, perplejo, con un papelito escrito a mano con
la dirección de una página web por único medicamento, por único fármaco, por
único remedio. Vivir para ver, piensas, aunque aún te queda la esperanza de
encontrar en esa web mágica, como te ha asegurado el doctor, la milagrosa
solución a todos tus males. Los del chaval y, de paso, los de quienes le rodean
de vez en cuando.
Pero no. Qué va. La web de marras -llamada Fisterra- resulta
ser una página de consultas muy apañada, un catálogo bastante extenso al que
sólo puedes acceder por completo si te registras con alguna de tus direcciones
de correo. Bienvenido el spam, piensas, extrañado de que aún no haya llegado: ojalá
no llegue. Consigues así treinta días de registro gratuito en los que esperas
encontrar la solución a todos los males físicos del universo pero te
encuentras, sin embargo, con un catálogo de consejos muy genéricos y, sin duda,
muy saludables -exactamente los mismos que has leído más de cien veces entre
las entradas sin tanto registro ni pedigrí de Google-, que sabes que el chico,
por desgracia, no va a seguir porque la vida, a ciertas edades, corre muy
deprisa y no hay tiempo, apenas, para dietas y a nadie le importa si el chaval
se va corriendo a jugar o a lo que sea y te deja inmerso, suspendido, en una
nube meteórica de gases abdominales. A fin de cuentas, a todo se hace uno.
De todas formas, aunque yo nunca le recomendaría a nadie que
se informase en Internet sobre enfermedades y remedios, la verdad es que no hay
que exagerar ni tampoco inventarse dramas donde sólo hay la realidad tal cual
es hoy en día. No existe ningún fármaco definitivo contra lo que -a falta de
otra sintomatología- es puro atolondramiento de la vida por salir adelante, crecer,
quizá multiplicarse y no hay, pues, ninguna duda de que una dieta sana y
equilibrada puede ser la mejor de las soluciones para casi todos los problemas
de salud que van surgiendo con los años.
Mientras tanto toca hacer balance de los recortes. Una fotocopia, exactamente la fotocopia de algo así como medio folio A4, y unos minutos, quizá, de necesaria y efectiva complicidad médico-paciente es lo que el sistema de salud pública ha conseguido ahorrarse con este modo de despachar al personal en menos, papeleo administrativo al margen, de cinco minutos. En mucho menos. En un visto y no visto. En un funcionarial y bastante aséptico parpadeo.
Mientras tanto toca hacer balance de los recortes. Una fotocopia, exactamente la fotocopia de algo así como medio folio A4, y unos minutos, quizá, de necesaria y efectiva complicidad médico-paciente es lo que el sistema de salud pública ha conseguido ahorrarse con este modo de despachar al personal en menos, papeleo administrativo al margen, de cinco minutos. En mucho menos. En un visto y no visto. En un funcionarial y bastante aséptico parpadeo.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home